0
0
Para Ti que desafortunadamente no sabes lo que haces….
Hace un rato venía yo “circulando (utopía) (ja…)” por una de esas miles de calles de nuestra gran ciudad, llena de baches, topes, tráfico, manifestaciones, plantones, atorones, semáforos o “estorbaforos” y demás cuestiones que obstaculizan el paso y no facilitan la circulación fluida en automóvil, carro, camioneta, camión o lo que sea… Lo anterior, con nefastas consecuencias para la contaminación atmosférica y para la productividad de las personas o de la ciudad.
En el carril a mí derecha, circulaba a la misma velocidad y tan pausadamente como yo lo hacía en su nuevo auto rojo, una muchacha de buena apariencia, bastante guapa, perfectamente maquillada, con grandes y carnosos labios carmesí, gigantescas pestañas y de unos veintidós o veintitrés años de edad. ¡Una modelo escultural en potencia, igual que el último modelo de su coche…!
Pero, no fue su aparente belleza exterior lo que más me llamó la atención. Lo que lo hizo, fue el ponerme a pensar inmediatamente sobre el estado de su belleza interior, ya que mi inesperada vecina de carril, o de estacionamiento, tenía su esbelta y sensual mano izquierda estirada por fuera de la ventanilla bajada de su carrazo y que en sus largos y delgados dedos, bellamente decorados por largas uñas rojas, delicadamente detenía un cigarrillo recién encendido. Seguramente hizo eso, para matar el tiempo requerido mientras podíamos avanzar algunos centímetros…
Entre avance y avance milimétrico de nuestros vehículos, la vecina del auto rojo, metía su manita al carro, y la llevaba directamente a su colorada boquita para efectuar una nueva y prolongada fumadita… Y otra, y otra, y otra más. ¡Acuérdense del tráfico…! Y también que me gusta la novela y escribir…
¿Pero, por qué me puse a imaginar o pensar en su invisible cuerpo?, obviamente obstruido su exterior por la portezuela de su carro, pero seguramente en proceso de quedarse también obstruidas sus venas y arterias por el efecto de la nicotina o las miles de sustancias cancerígenas que en forma despreocupada y tranquilamente, debido al atorón o no, se metía a sus vías respiratorias después de cada fumada. ¡Matando y reduciendo con cada fumada la duración total en años de su posible existencia…!
Además, también medité sobre la acumulación de grasas y materiales cancerígenos que chupada a chupada se acumulaban en todos sus órganos principales, incluyendo: -boca, lengua, nariz, esófago, bronquios, alveolos, matriz, hígado, pulmones, corazón, vejiga, estomago o riñones, sin olvidar sus bellos dedos y decoradas uñas, y peor si la vecina de carro hubiera estado embarazada en su futuro retoño, debido a la acción destructiva de dichos materiales recién fumados. Este tipo de daño al cuerpo o al bebé o su futuro nacimiento, desarrollo y crecimiento, se parece al daño que el aceite quemado hace sobre las válvulas, inyectores y hasta en los pistones del motor de su carro de reciente modelo.
Por favor, alguien que la estime o quiera mucho a la muchacha en cuestión, debiera de invitarla a “Dejar de Fumar” lo antes posible. Para que lo logre deberá de explicarle e indicarle los pros de hacerlo y también los riesgos innecesarios que corre al no dejar de hacerlo, tanto en lo personal o en lo futuro, para sus hijos, marido o familiares cercanos. Sobre todo en relación al daño que también hace el humo de la corriente secundaria del cigarrillo, o el que se respira por parte del fumador pasivo.
¡Querida amiga y vecina de viaje automotriz, ojalá y yo lo hubiera podido hacer si hubiéramos tenido la oportunidad de que el tráfico se hubiera detenido algunos minutos por completo! Cosa que no afortunada o desafortunadamente no sucedió… ¿Qué expresión en su cara hubiera yo visto al iniciar mi inesperada charla tratando de decirle que dejara de fumar lo antes posible? ¡¡Metiche, ese no es tu problema…!! ¡¡Eso, ya lo sé, es tuyo, pero…!!
Pero, de todas formas, como no pude decírtelo personalmente cuando te conocí en el viaducto o en insurgentes o en el restaurante o en la escuela o donde sea, aquí lo hago. ¡Medítalo con detenimiento y profundidad…! ¡Yo personalmente te dedico esta colaboración para que lo pienses! ¡¡Ah, y también dejes de fumar lo antes posible!!
¡Espero, ese alguien que te estima o quiere más cercano que yo en el “semi-ferico”, lea este mensaje y te ayude, el cual está especialmente dedicado para ti o para tu novio o esposo o para tu madre o tu padre o hermano o hijo, que también fuma o no lo hace, y tanto tu como tu media naranja o pareja, recapaciten sobre la adicción a la nicotina, a los cientos de químicos cancerígenos que contiene cada cigarrillo o cualquier cosa que contenga tabaco y te fumes y los daños terribles que causa día a día, fumada tras fumada, año tras año o cajetilla tras cajetilla, principalmente con cada cigarro que prendes, en la salud de las personas y sus familiares cercanos, incluyendo la tuya.
Pero, antes de terminar te pregunto: -“¿Sabías que la Nicotina es el adictivo más poderoso que existe en la naturaleza y que además es el insecticida natural más potente, ya que hace que la planta y las hojas del tabaco crezcan tanto, ya que mantiene lejos o mata a los insectos rastreros o voladores que se las quieren comer? ¿Lo sabías…? ¡La Nicotina es un insecticida o adictivo tan poderoso que hace lo mismo contigo como si fueras un insecto volador o rastrero de dos patas…!
Sabes, te comento para finalizar este ejercicio que en el diccionario me encontré la siguiente palabra: -“Fuñingue, que significa: Tabaco Malo”. La verdad, no sé si hay uno que sea bueno, pero, ¡Por favor, no te lo fumes…!
Si tienes más dudas o inquietudes sobre lo que aquí te he escrito, y finalmente decides que es importante dejar de fumar, puedes consultar mí libro, donde también encontraras esta publicación:
“Por favor deja de fumar, y si no lo haces no empieces”. Joega Editorial. 6ª. Edición. 2016”.
Y si quieres una copia, avísame para enviártela ya que esté lista la última impresión.
¡Ahorita, por falta de fondos, no está lista…!
¡¡Salud y saludos, Jacobo!!
