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En las elecciones realizadas el pasado 7 de junio, la ciudadanía, los votantes, expresaron una serie de mensajes que ojalá los partidos políticos y el gobierno en sus tres niveles entienda y actúen en consecuencia.
La sociedad claramente mostró un hartazgo por la corrupción, la impunidad, la falta de dinero en sus bolsillos, la manipulación mediática y la inseguridad. Sin embargo los partidos políticos, que en México son la más clara cara de la delincuencia organizada, parecen no darse cuenta de lo expresado por los ciudadanos.
De las elecciones, sacan cuentas de victorias y derrotas, se siguen peleando y burlándose de la ley, en vez de darse cuenta que se les está demandando honestidad, transparencia, y que realmente reflejen lo que sus votantes demandan, no lo que sus jefes y el presidente de la república quiere.
Todos los partidos políticos actualmente son iguales, un serie de pandillas que se pelean y llegan a acuerdos para dividirse un botín entre sus cúpulas, sin importar lo mejor para México. Parecen ignorar, tanto gobierno y partidos políticos, que el día de las elecciones tuvo que hacerse uso de las fuerzas federales, que hubo al menos un muerto, que durante las campañas hubo varios muertos relacionadas directamente con los candidatos y sus equipos de trabajo. Parece que ya olvidaron que no han resuelto puntualmente el caso de Ayotzinapa entre otros, que la pobreza sigue creciendo, que la ciudadanía en los casos que tuvo la posibilidad de votar por un candidato independiente competente lo hizo, que en la otra mayoría de los casos buscó la alternancia expresando su insatisfacción.
Los ciudadanos apreciaríamos más una conducta y expresión honrada de que las cosas no han salido como lo prometieron, un plan para remediarlo, una conducta que demuestre en forma real un castigo a la corrupción, dejar de lado la impunidad, un cambio de funcionarios que no han podido ser exitosos en sus puestos. Esto sería mucho mejor aceptado que seguir mintiendo, corrompiendo medios para que mientan, para que escondan sus faltas, para tratar de manipular.
Ojala que todo el gobierno entienda lo expresado en las elecciones, que lo que México requiere es mayor educación de calidad, más puestos de trabajo con mejor remuneración, mayor inversión en infraestructura y en investigación, y no más engaños de reformas y leyes truncas o inoperantes, que solo engañan. Se requiere de disminuir el aparato burocrático, el gasto corriente y hacerlo de manera contundente, no de más secretarias, institutos, comisiones, confederaciones y grupos similares que solo crean burocracia. Que los ciudadanos están hartos de gobernantes que se enriquecen en tres o menos años, pero que dejan endeudados a sus municipios, estados y al país entero.
Esperamos que entiendan que los ciudadanos ya no aguantaran elecciones de despilfarro para recibir más de lo mismo, más corrupción, más impunidad. Esperamos que el gobierno y los partidos políticos dejen de ser la primera fuerza de la delincuencia organizada de México
