En Oaxaca florece una diversidad de culturas, espejismo de toda una sociedad dónde bifurca el imperio con la costumbre. Posee una entrada constante de turistas, y en la zona centro colinda el espacio surreal entre lo tradicional, lo novedoso y lo pragmático de esta esencia.
En esta bella ciudad tuve el placer de hospedarme en Casa Bonita Hotel Boutique, una residencia con un estilo y arquitectura totalmente únicos en la Ciudad de Oaxaca, ofreciendo un servicio personalizado con los más altos estándares en calidad.
Casa Bonita es el lugar perfecto para vivir una experiencia inolvidable, combinando el lujo con la tradición en todos sus espacios y hermoso jardines. Con el fin de ofrecer confort y placer, estos jardines han sido diseñados para transportarnos a un ambiente de tranquilidad y belleza.
En su restaurante Estrella de Mar disfruté de su Cocina de Autor con especialidad en platillos de mar. Con un sofisticado e íntimo ambiente, ya sea en la terraza o en alguno de sus salones privados, Estrella de Mar es el único restaurante Signature Cuisine de Oaxaca. Cada platillo fue especialmente creado por la Chef Natalia Delgado para deleitar al paladar y ha sido todo un éxito. Mi recomendación es uno de sus platos de especialidad: el Atún Fresco al Mezcal, un manjar único.
El Bar de La Musique de Casa Bonita es un espacio para divertirse, relajarse, convivir y cantar, desfrutando de bebidas originales con sabor a México. También disfrute de un excepcional masaje en el Spa de Casa Bonita, gozando de su increíble alberca climatizada en el caluroso clima de Oaxaca.
La cultura mexicana se mezcla con lo moderno para crear un ambiente único. En Oaxaca se vive la historia y sumerge uno en el pasado. Se puede visitar los museos, las galerías, las zonas arqueológicas, conocer su maravillosa artesanía, atreverse a probar sus exóticos platillos y la deliciosa comida tradicional, llenar tu vida de color y alegría, pasar una tarde relajado escuchando música y viendo cómo bailan las parejas al ritmo del danzón en el Zócalo.